En la casa de la abuela Adela siempre había algo hirviendo en el fogón, gente entraba y salía con charolas bien servidas de dulces, cocadas, botellas de rompope y todas las delicias que ella cocinaba.  Las mermeladas y los jamoncillos podías encontrarlos frente a la ventana, donde los dejaba reposar.  

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Ella era una cocinera tradicional, en su cocina nada se desperdiciaba y todo se lavaba con extremo cuidado. En su casa siempre estaba la mesa puesta y a todo el que entrara, se le ofrecía un plato bien servido de la más deliciosa comida.  Sus recetas fueron heredadas por su madre y su abuela. Cuentan que fueron adquiridas de diferentes lugares, fusionándolas con las de casa, dando paso a nuestra tradicional comida mexicana.

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La abuela Adela vivía en una huerta rodeada de árboles frutales de cuyo fruto se hacían las mermeladas y, sobre todo, su famoso rollo de guayaba.  Cocinar era un festín en donde todos los integrantes de la familia participaban, razón por la cual,  en su casa siempre había risas y amenas conversaciones. Como un homenaje a su legado, hace más de diez años nos dimos a la tarea de rescatar todas sus recetas. Algunas las encontramos en cuadernos escritos con su característica letra cursiva; otras fueron heredadas directamente hacia sus hijas.

 

Al reunir estas recetas, recordamos a la persona generosa y de gran corazón que fue la abuela; por ello, estamos seguros que estaría muy feliz al compartir el sabor de sus manjares.  Fue así como nació Casa Adelita Gourmet, con el sueño de dar a conocer a todo México y el mundo, el tradicional sabor de sus platillos.  La calidad de nuestros productos nos distinguen. Hemos crecido, pero siempre siguiendo los pasos de la abuela Adela; sus procesos, sus técnicas tradicionales, el método artesanal, su sabiduría en el uso de los ingredientes siempre naturales y de la mejor calidad. Hoy, somos una de las casas de gastronomía mexicana gourmet más reconocidas a nivel nacional.  Hemos logrado compartir las Delicias Caseras de la abuela Adela en todo México para saborear, celebrar y festejar nuestra valiosa y compleja gastronomía tradicional.